Considerando la relevancia que la logística tiene en la actualidad para el mundo comercial, los sistemas de almacenamiento adquieren un rol cada vez más importante. Estos son indispensables para el buen funcionamiento de la cadena de suministros de una empresa, a la vez que su gestión incide en la satisfacción de los clientes. Por eso, a continuación, veremos qué es un sistema de almacenamiento y cómo funciona. ¡Acompáñanos!
¿Qué es un sistema de almacenamiento?
Para comenzar, debemos definir qué es un sistema de almacenamiento. Los sistemas de almacenamiento se definen como métodos que permiten que los productos o mercancías sean colocados en estanterías o estructuras pensadas específicamente para ello, optimizando el espacio disponible al máximo posible. La optimización del espacio consiste en que se pueda almacenar una mayor cantidad de productos en superficies y alturas más pequeñas, logrando un importante ahorro en recursos de almacenamiento.
En otros términos, al hablar de qué es un sistema de almacenamiento, podemos decir que se trata no solamente de las estructuras físicas para el almacenaje, sino también de la gestión que permite alcanzar un almacenamiento más eficiente y seguro. Se trata de una gestión estratégica para aprovechar al máximo el espacio disponible, facilitando, como consecuencia, el resto de las labores vinculadas a la logística del almacén.
En lo que respecta a las estanterías, estas son estructuras asociadas a un edificio pero independientes del mismo. Suelen estar fijadas a la estructura, pero pueden ser trasladadas de un lugar a otro. En lo que respecta a sus características físicas, esto puede depender de las particularidades de los productos que se deben almacenar.
¿Cuáles son las funciones de los sistemas de almacenamiento?
Teniendo en cuenta la definición de sistemas de almacenamiento, queremos hacer referencia ahora a sus funciones. Dentro de estas, las más importantes pasan por la optimización del espacio disponible en el almacén para los productos y mercancías. En este sentido, puede afirmarse que las principales funciones de los sistemas de almacenamiento están vinculadas directamente con el almacén y con la logística de almacenamiento.
Así las cosas, las principales funciones de los sistemas de almacenamiento tienen que ver con:
- El registro de las entradas y de las salidas de los productos y mercancías.
- La recepción de las mercancías y su organización de forma eficiente.
- El almacenamiento de los productos de forma segura y en condiciones óptimas para su conservación.
- El despacho de las mercancías frágiles de forma cuidadosa.
- El despacho de forma fácil y ágil de los productos desde las distintas partes del almacén, facilitando las labores de picking, packing y slotting.
Ejemplos cotidianos de los sistemas de almacenamiento
Para entender un poco mejor lo mencionado con anterioridad, podemos decir que existen ejemplos cotidianos de los sistemas de almacenamiento. Uno de ellos es una biblioteca. La biblioteca almacena una gran cantidad de libros utilizando estanterías y buscando optimizar el espacio de almacenamiento en ellas. Pero, a la vez, es un tipo de almacenamiento que facilita que los usuarios puedan acceder a lo que están buscando de forma sencilla y veloz.
Por otro lado, nos encontramos con almacenes de grandes empresas como puede ser el caso de Ikea. Esta famosa tienda de hogar y decoración posee almacenes en muchas de sus tiendas, donde se ejerce un sistema de almacenamiento basado en pallets de racks. Así, los productos son depositados en estanterías adaptadas especialmente a los pallets, siendo estos retirados cuando los productos se agotan y son sustituidos por otros.
Finalmente, otro de los ejemplos de sistemas de almacenamiento que podemos mencionar, tiene que ver con drive y pods de Amazon. Tomando el ejemplo de Amazon Cloud Drive, podemos decir que se trata de un servicio de almacenamiento de archivos que la empresa pone a disposición de sus clientes. Gracias a los pods, la empresa es capaz de ofrecer algunos de sus productos a los clientes en un tiempo muy reducido.
¿Qué elementos se utilizan en los sistemas de almacenamiento?
Hemos visto previamente qué es un sistema de almacenamiento, sus funciones y algunos ejemplos vinculados a ello. Ahora, queremos hacer referencia a algunos de los materiales y productos que se implementan en los almacenes para que estos puedan funcionar correctamente. Estos son:
Las estanterías:
siendo la opción más convencional y extendida, las estanterías se usan en los espacios donde se requiere una menor infraestructura. Se basa en una estructura que permite optimizar el espacio de almacenamiento superponiendo estantes unos sobre los otros, facilitando el depósito de mercancías de forma vertical.
Los palet-racks:
en este caso, hacemos referencia a estanterías diseñadas para el almacenamiento de palets. Son útiles para almacenar la mercancía de forma visible y fácilmente localizable, además, suele usarse para almacenar lotes completos de mercadería.
Los sistemas de almacenamiento compactos:
similares a las estanterías convencionales, son un sistema que se caracteriza por tener estanterías móviles que pueden desplazarse. De esa forma, se aprovecha mejor el espacio disponible en el almacén, a la vez que se separan las estanterías entre sí cuando hay que usar solamente un pasillo distribuidor.
Los tanques de almacenamiento:
en este caso, hablamos de estructuras que permiten el almacenamiento de diversos productos y materiales en estado líquido. Aquí se pueden incluir algunos como bebidas, leche, carburantes, entre otros.
Los silos de almacenamiento:
finalmente, los silos de almacenamiento son estructuras que permiten almacenar productos a granel. Aquí se pueden incluir desde granos de cereales hasta muchos otros artículos que requieran de esta metodología.
En conclusión, vistos los sistemas de almacenamiento y entendiendo cómo funciona y qué es un sistema de almacenamiento, en caso de estar buscando servicios logísticos, tenemos la mejor alternativa para tu compañía.
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